POR Gustavo Fallas M.
- Defensa alegó que sembraba cannabis para consumo personal
- Tribunal señala que cultivo es ilegal y se puede decomisar, pero no es un delito. La falta de pruebas que determinaran si un abogado sembraba marihuana en su casa para luego traficarla, lo libró de ser condenado a prisión.
Este martes 19 de enero, el Tribunal Penal de Alajuela absolvió, por duda, a Mario Alberto Cerdas Salazar, de 57 años, quien estaba acusado por la Fiscalía de esa zona de cuatro delitos de cultivo de marihuana para tráfico.
La Fiscalía había solicitado 24 años de cárcel contra el jurista, quien reside a 30 metros de los Tribunales de la localidad y tenía plantas de cannabis en su casa y expuestas al exterior.
Sin embargo, con dos votos a favor y uno en contra, el Tribunal concluyó que no se pudo demostrar que la finalidad de ese cultivo fuese la comercialización.
La jueza Carolina Leitón, quien leyó el fallo, explicó que se logró comprobar con certeza que Cerdas era un cultivador de droga, pero no que la vendiera.
“Los oficiales de la Policía Judicial declararon que no lograron establecer que el acusado se dedicara al tráfico”, recalcó.
El Tribunal también estuvo formado por Sonia Navarro y Miguel Fernández; este último salvó su voto, pues consideró que al tratarse de una importante cantidad de plantas (177 decomisadas), el fin sí era traficarla a terceros.
Durante el juicio que empezó el pasado 2 de enero, agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) manifestaron que enviaron a un colaborador para tratar de comprarle droga a Cerdas, pero este se negó.
Al imputado le allanaron su vivienda en cinco ocasiones entre los años 2014 y 2015, y le decomisaron los cultivos.
Cerdas alegó que es consumidor desde hace 20 años.
Sin delito. Durante la explicación de la sentencia, Leitón aclaró que cultivar marihuana es ilegal (aunque no se refirió a leyes en particular), pero que no es delito mientras no se pruebe que el objetivo es comercializarla.
“Lo ilegal es aquella conducta establecida por la ley, mientras que lo delictivo es aquella transgresión que tiene como consecuencia una pena”, enfatizó.
La jueza le recalcó a Cerdas que si sigue sembrando, la Policía puede destruir las plantaciones.
No más cultivo. El sembrar las plantas casi en las narices de las autoridades judiciales, llevó a Cerdas a más de cuatro meses de prisión preventiva, medida que cumplió desde agosto del 2015 y hasta ayer, cuando fue liberado.
A él lo representaron los defensores públicos Sebastián Mesén y Gonzalo Forero, quienes siempre argumentaron que el imputado sembraba marihuana solo para consumirla.
“Se ha hecho justicia porque se demostró que existe una diferencia entre licitud y delito, y que él (Cerdas) nunca cometió un delito, nunca suministró droga a terceros”, manifestó Forero.
Por su parte, Mesén señaló que le recomendaron a Cerdas no seguir con el cultivo de la droga.
El mismo criterio tiene Ana Yancy Quirós, pareja sentimental del imputado.
Esta aseveró: “Obviamente, ya no va volver a sembrar. Si él quiere luchar por ese tema, que lo haga donde no se vaya a ver expuesta su libertad”.
Colaboró la periodista Katherine Chaves R.
Fuente de imagen y noticia: La Nación- http://www.nacion.com/sucesos/juicios/Duda-finalidad-cultivo-marihuana-abogado_0_1537646246.html